Primera motocicleta BMW con caja automática: Enfoque en la R1300GS Adventure
La BMW R1300GS Adventure ASA es la motocicleta que representa un punto de inflexión para BMW y para el mundo de las motos en general. ¿Por qué? Porque es la primera en integrar una caja de cambios automática, un cambio significativo para los motociclistas acostumbrados a manipular el embrague. Pero, ¿realmente es buena idea dejar que la máquina maneje los cambios por ti? En esta prueba, desglosaremos qué funciona, qué no, y si esta innovación vale la pena ser probada. ¡Ponte el casco y prepárate para la aventura!
¿Una caja automática, para qué servir?
Cuando se menciona una caja automática, a muchos motociclistas se les eriza la piel. Es cierto que la idea de dejar que un motor maneje los cambios puede parecer antinatural para aquellos que disfrutan sintiendo cada cambio de marcha bajo sus pies. Pero BMW ha desarrollado un sistema bastante sofisticado, el ASA (Asistente de Cambio Automatizado). Es una caja de cambios tradicional asistida por motores eléctricos, uno en el embrague y otro para cambiar los marchas.
Entonces, ¿cómo se siente en uso? En realidad, una vez que arrancas la máquina, estás listo para salir sin tener que tocar el embrague. El motor se gestiona bien, y aunque cambies de marcha sin embrague, sigue siendo suave. Los cambios suben y bajan de manera natural, dependiendo del giro del acelerador o de la presión sobre los frenos. En la ciudad, la caja se mantiene en la segunda marcha, y incluso a baja velocidad, todo se mantiene estable. El único inconveniente es que el cambio de marchas puede ser un poco abrupto, pero sinceramente, es manejable.
La BMW R1300GS Adventure: sigue siendo una máquina de guerra
Desde un punto de vista puramente técnico, la BMW R1300GS Adventure no tiene nada que envidiar a sus competidoras. Es un trail XXL, un poco más pesada que su homóloga estándar (270 kg en orden de marcha), pero sigue siendo una auténtica bestia de potencia y confort. Con su motor Boxer de 1300 cc, desarrolla 145 caballos de fuerza y casi 150 Nm de par. Es decir, la máquina te impulsa sin esfuerzo, y incluso en conducción dinámica, el motor responde sin vacilaciones.
El tanque gigante de 30 litros y la pantalla alta (eléctrica, nada menos) son perfectos para protegerte de las inclemencias del tiempo. Sin embargo, la ergonomía puede desestabilizar a algunos. La posición de conducción es un poco más extendida, lo que no es ideal para personas de baja estatura. Y si te encuentras en un camino mojado, prepárate para que el agua salpicada repinte la parte trasera de tus piernas. Un pequeño detalle que puede molestar.
La transmisión automática: una prueba en condiciones reales
Pasemos a la práctica, con una prueba en varios tipos de rutas. La R1300GS Adventure con su caja automática es una auténtica máquina para rodar. Una vez que le agarras el truco, te das cuenta de que te facilita mucho la vida. No tienes que preocuparte del embrague, la caja de cambios hace todo el trabajo. Y aunque elijas un modo más dinámico, se adapta sin perder reactividad. Ciertamente, no es tan suave como una caja de doble embrague, pero no está lejos. ¿El pequeño inconveniente? Claramente, es en los momentos de desaceleración, donde la caja puede tardar un poco en pasar las marchas. Pero es realmente por poner peros, porque en general, está muy bien gestionada.
